Los vinos reserva están preservados durante años en barricas de madera que mejoran su sabor y textura y los convierten en auténticas joyas. El problema llega cuando el líquido tiene que embotellarse, y pasa de estar conservándose en madera a estar metido en una botella de cristal.
Es por eso que, una empresa italiana llamada Pinocchio Barrique ha tenido la idea de fabricar y comercializar botellas de madera de roble para embotellar bebidas alcohólicas añejas de gran valor como vino, whisky o ron. Según sus creadores, en pocos días las bebidas comienzan a adquirir aromas y sabores que las enriquecen todavía más, además de mejorar sus características organolépticas gracias a, como ellos mismos la han bautizado, la ‘barrica más pequeña del mundo’.
Pinocchio Barrique asegura que las botellas de madera actúan rápidamente, en tan sólo unos días las bebidas que se guardan en ellas adquieren aromas y sabores parecidos a los que se obtiene en la crianza en las barricas tradicionales. En mínimo tres días se consigue el mismo resultado que en meses o incluso años en los barriles.
Estas botellas con capacidad de 70 cl poseen un diseño cuidado y elegante, aunque su vida útil es bastante breve. Se pueden realizar un máximo de 20 envejecimientos, según la empresa. Aunque otras personas saben aprovechar la botella al máximo y una vez no puede ser utilizada para el fin por el que fue fabricada, la aprovechan como elemento decorativo. El precio de la botella es de 69€.