Malas noticias para la industria mundial de la madera. La plaga del escarabajo de la corteza en los bosques de República Checa, ha aumentado últimamente. La presencia de este animalito, un parásito que deja sus huevos debajo de la corte de los árboles, está asolando los bosques. La razón, reside en que cuando las larvas salen del huevo, carcomen el interior del árbol.
Un problema que surgió hace años
Este hecho no es algo novedoso, puesto que todo comenzó en el año 2003, donde el escarabajo se reprodujo tras un año seco y muy caluroso. Esta situación, se normalizó al poco tiempo gracias a las medidas que se tomaron, pero en el año 2015, un temporal asoló Chequia y dejó a sus bosques en pésimas condiciones. Los técnicos forestales no pudieron procesar la madera de manera rápida y el escarabajo volvió a aparecer.
Los expertos, han destacado que desde ese momento, la tragedia creció. Los problemas de las temperaturas o la escasa mano de obra en los bosques, han ayudado a ello. Asimismo, la baja venta de madera y su escasa demanda, hace que la madera se quede en los bosques y con ello, el escarabajo observa un perfecto lugar donde quedarse. Lo más importante, es que los lugares no están debidamente saneados.
El escarabajo y la industria forestal
La presencia de este bicho, hace que los problemas en la industria forestal aparezcan. La madera dañada, forma un tercio del material explotado hoy en día y la situación se espera que aún empeore próximamente.
Es cierto que la madera carcomida puede ser procesada para la producción de celulosa o combustible, pero no tiene nada que ver con la calidad de la madera intacta, que sirve para poder fabricar muebles. Esta serie de problemas, influye directamente en los precios del material intacto, puesto que aumentan. A lo largo del último año, el precio cambió y entre junio de 2017 y junio de 2018, el descenso que se ha producido alcanza los 30 euros.
Debido a que existe abundante madera en esta zona, el interés de las empresas por las subastas, disminuye. Lo cierto es que República Checa, ha invertido millones de euros para poder combatir a este insecto, pero existe un eterno debate en torno a si es conveniente que la naturaleza continúe como debe ser o bien, promover acciones para poder combatirlo.