Conseguir cierta eficiencia energética en tu hogar utilizando madera es mucho más sencillo de lo que te imaginas. La eficiencia energética es una práctica que tiene como objetivo principal la reducción del consumo de energía optimizando el uso de la electricidad, el gas natural u otros tipos de fuentes de energía. Esto, además de respetar y proteger el medio ambiente, nos ayuda a reducir los importes de las facturas de energía del hogar. La eficiencia energética puede conseguirse de diferentes formas: desde los materiales con los que se construye una vivienda hasta la contratación de tarifas de energía que utilicen únicamente fuentes de energía renovables.
Este último se suele pasar por alto. Sin embargo, al momento de dar de alta la luz, está en tus manos elegir una compañía eléctrica que trabaje únicamente con energías limpias y renovables. Recuerda que el alta de la luz es gestionada por las distribuidoras – a quienes les tendrás que abonar el importe por el alta de la luz – y no por las comercializadoras. Si quieres más información sobre cuánto cuesta dar de alta la luz, haz clic aquí.
Lógicamente, una de las mayores preocupaciones de los consumidores al elegir una comercializadora, es el precio de las tarifas. ¡Pero no te preocupes! Encontrar una compañía de luz barata y eco-friendly es posible; puedes encontrar más información en este enlace. De este modo, ayudarás a proteger el entorno y conseguirás pagar menos en tus facturas de la luz.
Propiedades térmicas de la madera
Otra forma de tener un hogar eficiente energéticamente hablando es contar con un buen aislamiento térmico. Éste hace referencia a la envolvente: el grosor, el material y las características propias de la envolvente. La madera es una de las mejores envolventes para hogares pensados para lograr eficiencia energética, comodidad y respeto al medio ambiente. De hecho, de media la madera es hasta 15 veces mejor que el muro de hormigón como aislamiento térmico.
El estudio realizado por el Instituto de Biomecánica de Valencia (IBV) tiene como objetivo destacar, precisamente, las cualidades térmicas de la madera para así desmentir ciertas informaciones sobre este material. Se suele tener la errónea idea de que la madera es muy vulnerable a la humedad mientras que, cuando está bien tratada, la madera absorbe o cede humedad al entorno, ayudando así a purificar el ambiente y mantener un grado de humedad óptimo.
Contar con un aislamiento térmico en tu hogar supondrá un ahorro de energía de entre el 20% y el 50% – dependiendo del consumo energético y las características propias de la vivienda – ya que de este modo no perderás calor por ningún rincón.
Otras formas de conseguir eficiencia térmica
Además de un buen aislamiento térmico y la correcta elección de tus tarifas de energía, puedes conseguir un hogar eficiente siguiendo los siguientes consejos:
- Evita el uso del aire acondicionado y apuesta por la ventilación natural o los ventiladores.
- Poner la calefacción cuando sea necesaria y en ningún caso dejarla todo el día encendida.
- En cuanto a los electrodomésticos, poner el lavavajillas y la lavadora cuando estén llenos, no abrir el horno mientras se esté cocinando y no meter recipientes calientes en el frigorífico.